En estos tiempos en donde la única constante es el cambio, las empresas o los negocios que quieran crecer o incluso simplemente mantenerse, requerirán, de ahora en adelante, de innovar permanentemente.
Más allá de introducir mejoras o cambios a sus productos y/o servicios, que en muchas ocasiones se piensa es innovar, tendrán que pensar en que innovar, en muchas ocasiones es también intervenir en los procesos administrativos y de producción, haciendo mejoras en función de satisfacer plenamente y de una forma eficiente a sus consumidores.
Lo anterior nos permite concluir que muchas veces la estrategia puede moldear a la estructura empresarial y de negocio y desde luego adecuar la filosofía de la empresa a estos cambios e innovaciones, una organización que no tenga establecida actualmente la innovación dentro de su misión, es una empresa que no llegará lejos en el tiempo y la distancia (amplitud y cobertura de negocios), la innovación en el mundo de los negocios hoy debe ser una constante.
Innovar va desde realizar pequeños cambios en nuestros conceptos/productos y/o servicios, como la modificación de una etiqueta, la tropicalización o climatización de los mismos para adaptarlos a otro mercado o cultura, como Mac Donald’s que vende pollo en Nicaragua o “gallo pinto” (arroz con frijoles) en Costa Rica, hasta cambios radicales como la introducción de un verdadero nuevo concepto/producto como el caso de Mc Café para seguir con el ejemplo.
Un ejemplo de una innovación disruptiva es el internet que nos ha permitido la construcción de las redes sociales a través de los espacios virtuales on line que cohabitan en este espacio virtual, desarrolladas recientemente y que están transformando a la sociedad y acelerando a la misma hacia la sociedad global dentro de esa aldea global que al final de los años 60 y principios de los 70, Marshal McLuhan acuñó este término para describir la interconexión humana a escala global. Estas redes nos están llevando a transformar el lenguaje, ahora tenemos 140 caracteres para comunicarnos (twitter), hoy podemos participar en nuestra sociedad y comunicarnos con el apoyo de fotografías o videos (facebook), también están transformando a la publicidad a través de la viralidad que generan los videos (Youtube) y desde luego a mi querida industria de la investigación de mercados, seguramente habrá transformaciones en los modelos educativos y en general como lo mencionamos en la cultura y finalmente en la sociedad como un todo y en forma holística.
También se ha logrado lo impensable, el don de la ubicuidad o la omnipresencia al estar al mismo tiempo en muchos lugares a través de los distintos medios existentes, recientemente hice una presentación para un cliente que ubica su corporativo en Miami, pero vía un paquete en internet la presentación en pantallas se hizo desde Puebla para México D.F., New York, Guadalajara y Miami, pudiendo incluso que algunos ejecutivos la observaran en sus BlackBerry o Ipads caminando por algún aeropuerto o calle de su ciudad.
Cuando se introduce en el mercado una innovación disruptiva, normalmente emanada de un insigth social relevante, se puede crear si se maneja estratégicamente, lo que llamamos un océano azul, esto es un mercado dónde no exista la tradicional competencia descarnada, esa competencia que produce sangre entre los competidores, un océano rojo por lo mismo, sino un mercado utilizando la metáfora de un océano azul, ya que esa innovación disruptiva no permitirá, durante algún tiempo, tal vez para siempre, que seamos los únicos, dadas las diferencias establecidas por la innovación, en ese océano o mercado.
Esta adopción de las innovaciones va a determinar y no necesariamente para los que las generan, sino para las que las adoptan, el que tan rápido estaremos en las olas que generan éstas, como decíamos, incluso la subsistencia de nosotros mismos dentro de esta nueva sociedad que está iniciando su construcción, lo que llamó la cuarta generación del marketing (ver apartado marketing en esta página web). Y usted amable lector con qué tipo de usuario se identifica y los que tenemos negocios, sabemos dentro de que tipo se encuentran nuestros consumidores.
Es probable que lo mejor sea mandar un tweet pidiendo apoyo a la red social para que no nos quedemos fuera de la jugada.